Cenizas que purifican
La más severa de todas las impurezas rituales es la tum’at met, la impureza contraída por el contacto con un cadáver humano. Esta sección detalla el proceso de purificación para una persona u objeto que ha contraído esta forma de impureza. Se sacrifica una vaca de pelaje rojizo y se quema su cuerpo, se añade agua de un arroyo a las cenizas y esta mezcla se rocía sobre la persona u objeto que queda libre de esta impureza. Una persona impura no puede ingresar al Tabernáculo o al Templo hasta que el proceso de purificación esté completo.
Muerte de Miriam
La Torá registra la muerte de Miriam, la hermana de Moshé, en el cuadragésimo año de la estadía de los israelitas en el desierto. Con la muerte de Miriam, las aguas que fluían providencialmente se secan. El pueblo se queja amargamente por la falta de agua.
Moshé golpea la roca
Dios le dice a Moshé y a Aharón que tomen un bastón y reúnan al pueblo frente a una roca en la montaña y sin tocarla: Moshé debe “hablar” a la roca que milagrosamente dará su agua. Esto debía ser una demostración adicional del poder Divino y de su amor por Israel. Pero Moshé «golpea» a la roca, de la cual sale ahora agua, lo que da la impresion de haber sido causado por el impacto del bastón –o por un acto de violencia– en lugar de la intervención Divina. Dios castiga a Moshé y Aharón y ya no seguirán liderando por mucho más tiempo al pueblo de Israel.
Rechazo del rey de Edom
Moshé envía mensajeros al rey de Edom solicitando permiso para pasar por su tierra en su camino a la Tierra Prometida. A pesar de las promesas de Moshé de no causar daño a la tierra mientras pasan, Edom rechaza el paso de los judíos. Por lo tanto, los judíos se ven obligados a rodear la tierra de Edom y acercarse a Canaán desde el este.
Muerte de Aharón y batalla contra los cananeos
Los judíos llegan al Monte Hor. Por mandato de Dios, Moshé, Aharón y el hijo de Aharón, Eleazar, suben al monte. Aharón se quita las vestiduras de sumo sacerdote y Eleazar se las pone. Luego, Aharón fallece. Toda la nación lamenta la muerte de Aharón durante treinta días.
Los primeros rehenes judíos
Los cananeos de la ciudad de Arad en el Negev, atacan a los judíos y toman prisioneros. Los judíos rezan a Dios, y no negocian con los terroristas sino que emprenden una operación de rescate que gracias a Dios culmina con éxito.
El pueblo se queja de su comida
En una enorme demostración de falta de agradecimiento, los judíos afirman que están «hartos» del maná. Dios envía serpientes al campamento israelita, y muchos mueren. Moshé reza a Dios en nombre de los judíos. Siguiendo las instrucciones de Dios, Moshé diseña una serpiente de bronce y la coloca en lo alto de un poste para que los judíos miren hacia arriba, recen y sean curados.
Conquista de la tierra de los Emoritas (amorreos) y la nación del Bashán
Los judíos se acercan a la tierra de los amorreos, ubicada en la orilla oriental del río Jordán. Envían un mensaje a Sijón, su rey pidiendo permiso para pasar por su tierra en ruta a Canaán. Sijón se niega y en su lugar reúne a sus ejércitos y ataca a los judíos. Los judíos son victoriosos y ocupan las tierras de los amorreos. Luego, Og, rey de Bashán, también ataca a los judíos. Los judíos triunfan nuevamente y ocupan su tierra.
Ahora la nación judía ha llegado a la orilla del río Jordán, justo enfrente de la ciudad de Jericó en la tierra de Israel. Listos para conquistar la tierra .